En 1946 uno de los integrantes del Malón de la Paz anota en un cuadernito que hace las veces de su Diario: “Si no hay justicia que no haiga leyes….” Mientras tanto, casi 70 años después en Jujuy maestros y comunidades originarias se alzan de pie frente a una vida de miserias y silencios que busca imponer Morales mediante una Reforma Constitucional tan reaccionaria como viciada de nulidad que apunta sin ninguna duda al manejo discrecional del “litio y tierras raras”, de hecho, Gerardo Morales desde la gobernación se asume como un eficiente empleado de las corporaciones y hasta les reforma la Constitución Provincial para ajustarla a medida de sus empleadores. Conviene leer la historia para ver las similitudes con lo ocurrido en 1946.
El libro “DIARIOS DEL MALÓN DE LA PAZ” (editado por la Biblioteca Nacional) viene a complementar mi investigación “Los indios invisibles del Malón de la Paz” (Sudestada/Continente). Hoy en Jujuy, aunque parezca mentira uno de los manifestantes es Narciso López quien en el Malón de la Paz de 1946 acompañó a su padre a Buenos Aires (fotos), y que como los demás acabó secuestrado y envagonado en un tren de ganado para arrojarlo a la Puna tal como describo en el texto. En su momento, presenté un proyecto de ley que logró un subsidio del Congreso Nacional para tres de aquellos niños del ´46 que hasta Bayer levantó en Página/12 (https://www.pagina12.com.ar/…/3-133254-2009-10-10.html) El poder tiene claro cuando debe unirse, ya que Morales no está solo, aunque a esta altura pocas cosas nos sorprenden: el peronismo jujeño avaló y votó esa Reforma Ilegal. Jujuy hace frente a una justicia injusta y leyes ilegales. Tal como dijo uno de los maloneros en 1946: “Si no hay justicia que no haiga leyes…” Es lento, pero viene… (foto Alejandro Valko-Estepario Lobo).